Paul Goldberger dijo: “Nueva York sigue siendo lo que siempre ha sido: una ciudad de flujo y reflujo, una ciudad de constantes cambios de población y economía, una ciudad prácticamente sin descanso”.
Y es en Nueva York donde sonaron las alarmas de la CDC de Estados Unidos, es en esta gran ciudad cosmopolita donde se reporta un aumento de casos de SARS-COV-2 debido a dos nuevas subvariantes: la BA-2.12 y la BA-2.12.1, en 23% y 27% de nuevos casos respectivamente en relación a la subvariante BA-2, llegando cerca del 90% de los casos en el centro de la ciudad. Por este motivo, la Administración Biden extendió la emergencia sanitaria pública nacional por otros 90 días en todo USA. En Pensilvania, se ordenó retornar al uso de las mascarillas y otros estados están considerando seguir la norma.
En ningún caso se ha comprobado que haya incremento en la severidad de la enfermedad, aunque sí de su infectabilidad aún no bien cuantificada.
La Dra. Mary T. Bassett, alta comisionada de la ciudad alertó al público neoyorquino para que tomen sus debidas precauciones aprovechando en vacunarse o inocularse sus “refuerzos de vacunas” para mejorar su inmunidad contra la COVID-19 y mejorar la aireación de sus locales y hogares empeorando que aún sigan con el frío invernal nórdico.
Kirsten St. George, virólogo de Nueva York mencionó que en otros 40 países y cerca de 30 estados de USA cuentan con estas subvariantes aunque en menor proporción. Entre estos países tenemos a Canadá, Gran Bretaña, Australia, Israel y Alemania, todos visitados generalmente por neoyorquinos.
En La ciudad de Nueva York, en 2 semanas aumentó un 60% entre todas las variantes, pero con una reducción del 9% en el número de fallecidos, aunque en todo USA, aumentaron en 27% los casos en especial de BA-2, con un 27% menos de mortandad y 13% menos de hospitalizaciones.
Y si así está Nueva York siempre con el despunte de nuevos casos y nuevas variantes que rápidamente viajan por todo el mundo, me pregunto ¿cómo seguirá China con su régimen casi carcelario poblacional de COVID-CERO, donde Shangai está sufriendo un desabastecimiento de alimentos debido a la desintegración en el sistema de suministros de la ciudad.
Nueva York por un lado con su gente cosmopolita y a veces irreverente, sin cuarentena después de haber experimentado en carne propia una de las peores crisis sanitaria de su historia en esta pandemia podrá controlar estas nuevas infecciones por las subvariantes como “resfriadinhos” al estilo Bolsonaro, mientras que Perú se está preparando para una cuarta vacunación sobre todo a los más susceptibles, iniciando con el sector salud que a diferencia de otros presidentes nos dejaron de lado.
Mario Cabani
Médico, gestor en proyectos de innovación y bienestar social, graduado como médico cirujano en la Universidad Nacional de San Marcos. Realizó estudios de postgrado en el Hospital Universitario Pedro Ernesto entre 1991- 1993 en Cirugía General y 1993 – 1996 en cirugía plástica con certificado por la Universidad Estatal de Rio de Janeiro, Brasil. Fundador y gerente general de empresas dedicadas a salud, agricultura y construcción, así como de Organizaciones sin Fines de Lucro con convenios nacionales e internacionales para la atención gratuita de pacientes desfigurados y el mejoramiento genético de embriones vacunos.
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