¿Por qué no pasa nada y sigue este gobierno del mal?

Seguramente has leído muchas columnas y demasiadas opiniones tratando de encontrar las respuestas que tú vas a considerar correctas o algo que se aproxime a una definición de lo que está sucediendo. Ese es el error común, buscar, esperar respuestas viendo que todo sigue un curso de desastre.

¿Pero acaso no es necesario saber lo que sucede para así estar mejor enterados de todo? No, eso es algo poco prudente, o en todo caso es una pequeña parte porque si estás enfermo de algo, reaccionas con un tratamiento inmediato, porque si te caes, te levantas, porque si tienes una pesadilla te despiertas. En cambio en el Perú estamos acostumbrados a enfermarnos y esperar que cuando nos encontremos en Ciudados Intensivos tengamos una esperanza de vida, estamos acostumbrándonos a caernos y quedarnos en el piso esperando “el momento o las condiciones” para levantarnos, estamos como pidiendo a gritos otra pesadilla porque necesitamos completarla. Creemos, nos confiamos en el repechaje. Es así la nueva peruanidad del sometimiento voluntario al silencio, lo siento, es así.

¿Y entonces, no nos vamos a curar, no nos vamos a levantar, nunca despertaremos? Por supuesto que no será eterno, el problema es que hay que dar golpes de valor, gritos de carácter y bofetadas de alivio, es necesario y urgente porque el cuerpo y la mente están adormecidas.

La reacción ha sido definida por los medios de comunicación como algo negativo, la reacción al crimen y al delito desde el Estado no se puede condenar ahora porque te reprimen, es inherente al mismo y los burócratas del gobierno se sienten ofendidos; la reacción a la manipulación de la prensa no se puede decir, porque inmediatamente te atacan sus alguaciles y enturbiados. Y me preguntan otra vez, ¿Entonces? A usar las redes, a usar las palabras, a difundir los mensajes de inspiración y aliento, de rebeldía y consecuencia. Nada de reflexiones y recuentos. A levantar la mirada, en eso no existe censura –al menos por ahora- y es nuestra mejor arma de Libertad.

¿Sabes qué? Eres importante, eres el líder que el país reclama, que tu familia exige. Eres la voz que no necesita mentir para decir cuál es el camino. Es tu hora, ahora es la hora.

Ricardo Escudero
Especialista en temas previsionales y recursos humanos, con formación en la UNMSM, Universidad de Lima y ESAN. Becario de las fundaciones Konrad Adenauer y Friedrich Ebert; Jefferson Fellow por The Thomas Jefferson Educational Foundation. Investigador periodístico y columnista de opinión política y análisis social. Autor de «La rebelión de la clase media» y «Desborde del estado y crisis popular».