La comunicación como proceso interactivo se encuentra presente en prácticamente toda actividad humana, más allá de que haya intención de decir o transmitir algo: nuestro silencio, actitud o conducta dejan espacio a una multiplicidad de percepciones e interpretaciones que variarán según la edad, género, experiencia, ideología, cultura, sociedad, contexto o simplemente interés.
Con la llegada de la tecnología informativa y el incremento de su uso tanto en diferentes materias, ciencias, o como en tipo de personas, ha permitido que la comunicación tenga dimensiones, en muchos casos, inconmensurables.
Sucede que a través de la comunicación directa o mediatizada podemos llegar e incluso influir en la forma de pensar, sentir, hacer o querer de muchas personas. De ahí que se desprenda una facultad que aún no terminamos de aprovechar: alfabetizar en democracia.
El empoderamiento del que muchas veces hablamos y promovemos en diferentes segmentos de la población para lograr su autoidentificación y autosuperación, no logra aún calar en la actitud y en la voluntad de participar políticamente.
La decepción que los políticos de turno nos revelan, sus continuas apariciones en procesos de corrupción, prebendas, acuerdos bajo la mesa entre otras perlas, no inspiran ni motivan a nadie.
La desconfianza y el desinterés nos aísla hasta que salimos a comprar y nos encontramos con una lenta, pero significativa inflación que el bolsillo lo nota.
Sin embargo, los medios digitales, se han convertido en sugestivos y accesibles plataformas de comunicación y aunque en épocas electorales adquieren una significación mayor, estamos aún en pañales para entender el potencial que tienen para promover la participación política y democrática.
Hay mucho por aprender en esta sociedad del conocimiento, precisamente para ser capaces de discernir lo real de la realidad; la verdad de la objetivización de los hechos; las medias verdades de las medias mentiras para satisfacer intereses particulares.
La alfabetización digital para la democracia es cada vez más urgente para construir ciudadanía.
Necesitamos que las personas se comprometan social y políticamente.
Nuestros niños deben saber decodificar sentidos, significados y subtextos de imágenes, sonidos y discursos que envueltos en relatos nos inundan cada día de ideas cruzadas.
Los jóvenes hiper digitalizados deben aprender a diferenciar lo que les alimenta de lo que los distrae, y los adultos deben aprender a compartir bajo responsabilidad, los efectos de un mensaje viral.
Una vez más volvemos a nuestro leitmotiv “el día que dejemos de aprender, nos volveremos viejos”.
La alfabetización digital no se aprende en un día. La alfabetización digital no tiene visos de acabarse en capacitaciones o actualizaciones recurrentes. Va más allá de conocer las herramientas de la construcción de sentido y forma en los medios de comunicación o en las plataformas digitales. La alfabetización digital va en dirección de sostener la transformación de sociedades cerradas en sociedades abiertas, globales, democráticas y participativas que promuevan la inclusión, la integración, el respeto, tanto como el conocimiento de los diferentes puntos de vista para tomar decisiones.
Hoy más que nunca necesitamos alfabetizadores digitales que enseñen a otros no solamente el manejo de las plataformas digitales, el manejo de sus lenguajes, el sentido de sus propuestas y mensajes, tanto como la codificación y decodificación de sus relatos; sino que nos enseñen a escuchar con todos nuestros sentidos.
Tal vez así podamos fomentar una mayor conciencia del papel de ocupamos y del rol que nos corresponde para construir ciudadanía y democracia.
Santiago Carpio.
DOCTOR EN COMUNICACIONES de la Universidad Autónoma de Barcelona. Consultor – especialista en estrategias de comunicación, habilidades socioemocionales y producción audiovisual. Expositor y promotor del storytelling para la educación y el marketing. Docente PUCP, CENTRUM. Profesor Referente U. Continental. Docente UPN. Director de Proyectos e Innovación Educativa, Escuela Superior Toulouse Lautrec. Ex Presidente del Comité de Ética de la Sociedad Nacional de Radio y Televisión. Ex DIRCOM de la Oficina General de Comunicaciones del MINEDU.
0 comments on “Alfabetización digital, participación y democracia”